jueves, febrero 24, 2005

clase de redacción

- a tí no te dan igual las faltas de ortografía, tienes pinta de ser uno de esos que siempre se preocuparon por escribir bien, debes pensar hasta que eso es importante - mejor dejalo - mejor no, mejor voy a darte la paliza otro poco más, chico alto, chico guapo, voy a...déjame molestarte un poco - vas a conseguir que me vaya -el Papa está a punto de morir, tu eres periodista, lees libros, tu hermana vive en Barcelona, ¿es tarde para pedir una copa más? A mí me recuerdas a alguien, pero no de esa forma en que a veces alguien se te asemeja a alguien, no sé, es diferente, tu me suenas mucho, chico listo, chico de ojos-azules-y-cazadora-de-cuero - mejor te perdono y me voy a dormir, solo, solo, solo hace frío y es tarde y es febrero

clase de redacción

sábado, febrero 12, 2005

Al final sí que me lié. Pero da igual. Si áun estáis vivos, si amáis el cine, ¡Corred a verla!

viernes, febrero 11, 2005

Esta mañana he estado en Zamora. He recogido ya mi carné de la biblioetca y he firmado el contrato del piso con mi casera. Así que hoy es un día importante, hoy que es 11-F. Los días 11 siempre pasan cosas importantes. El 11-S, el 11-M, el 11-N, es decir, el 11-11, que fue el día que yo nací y es mi cumpleaños. y otras cosas menos confesables, buenas o malas, también me han ocurrido los días 11 (onces). También he vuelto a pasarme por la redacción y he conocido a ds compañeras que el otro día se me escaparon, Paz y otra cuyo nombre ahora no recuerdo.
Dentro de una hora Mateo pasará por aquí e iremos a ver la nueva peli de Eastwood, Million Dollar Baby. Sigo mucho al viejo Clint, sobre todo desde que se ha centrado en la dirección de una peli por año, a lo Woody Allen. Aunque espero que ésta se parezca más a Mystic River que a Los puentes de Madison. Si no me lían, si no me lío, si la noche no me confunde y acabo llegando a casa por la mañana, prometo una de mis infames críticas esta misma noche.

Las máscaras del héroe  Posted by Hello

jueves, febrero 10, 2005

Meeting Cortázar

Quizá la más querida Me diste la intemperie, la leve sombra de tu mano pasando por mi cara. Me diste el frío, la distancia, el amargo café de medianoche entre mesas vacías. Siempre empezó a llover en la mitad de la película, la flor que te llevé tenía una araña esperando entre los pétalos. Creo que lo sabías y que favoreciste la desgracia. Siempre olvidé el paraguas antes de ir a buscarte, el restaurante estaba lleno y voceaban la guerra en las esquinas. Fuí una letra de tango para tu indiferente melodía.

miércoles, febrero 09, 2005

to tampoco, tu también

A veces los e-mails que recibo en mi cuenta de hotmail tienen remitentes que desconozco. A veces no puedo evitar la curiosidad y acabo leyéndolos. Sé que corro el riesgo de estar abriendo la puerta a todos los virus del mundo internetero, pero lo hago. A veces me topo con declaraciones de principios, con un relato, con alguien que me ha leído en este blog y quiere interactuar conmigo, charlar vía e-mail.
A veces esos mensajes llegan de madrugada, a esas horas en las que debería estar durmiendo, y mi imaginación se dispara, imagino al remitente con un aspecto físico muy concreto y trato de encajar las palabras con ese rostro, o con el ordenador en el que está escribiendo, que también lo puedo imaginar. Trato de dibujarle un contexto, un espacio alrededor. Sé que casi munca acierto, pero la verdad es que no me importa mucho.
Hoy he conocido a parte de mis nuevas compañeras de redacción. Digo parte porque no estaban todas y digo compañeras porque todas, las cinco, son chicas. Aparte de una administrativa, que también es mujer. La acogida, muy buena. Tengo buenas vibraciones con el trabajo. También sigo buscando piso, aunque casi ya me he decidido por un estudio que, es verdad, me tiene ganado. Y ya casi me imagino allí, y eso es un paso. Zamora es la cuarta ciudad en la que voy a vivir un tiempo más o menos prolongado, después de Valladolid, Salamanca y Madrid. Hoy ya me han saludado por la calle. ¿Todas las ciudades son la misma?
La publicidad está basada en la idea de euforia, de fugacidad. Nada más absurdo y desenmascarador que escuchar una cuña radiofónica o un spot televisivo fuera de su contexto natural. Nada mejor, más desoxidante, que escuchar un anuncio de hace 15, 20, 25 años, elogiando virtudes que ya han caducado. Cómico, necesario.
Las chicas guapas siguen siendo las que están más tristes porque saben que hay más tíos dispuestos a hacerles daño.

domingo, febrero 06, 2005


Sola ante el peligro, la inmensa Billie. Te queremos tanto... Posted by Hello

- "¿disculpe, tiene algún problema con su coche?" Posted by Hello

viernes, febrero 04, 2005

Observado

Si alguna vez estás en el vestíbulo de un hotel grande y empieza a sonar el vals El Danubio Azul, sal corriendo. No pienses. Corre.
Las cosas ya no se anuncian de forma directa.
Si alguna vez estás en un hospital y llaman a la enfermera Suárez para que vaya a oncología, no aparezcas por allí. La enfermera Suárez no existe. En los hoteles grandes el vals quiere decir que hay que evacuar el edificio. En la mayoría de los hospitales la enfermera Suárez significa que hay un incendio. El doctor Valdo quiere decir un suicidio. El doctor Conde quiere decir que alguien ha dejado de respirar.
Si alguna vez vas al Hard Rock Café y escuchas por megafonía que Elvis está abandonando el edificio, significa que todos los camareros deben ir a la cocina para saber qué platos especiales del día se han terminado.
Esas son las cosas que la gente te dice cuando no te está diciendo la verdad. En los teatros de Broadway, Elvis está abandonando el edificio significa que hay un incendio.
En un supermercado, llamar al señor Cañete equivale a llamar a un guardia jurado armado. Anunciar Llegada de mercancía de ropa de señora significa que hay alguien robando en ese departamento. Otras tiendas llaman a una mujer fictícia llamada Bárbara. Bárbara a la entrada quiere decir que alguien está robando en la entrada de la tienda.
El señor Cañete, Bárbara y la enfermera Suárez significan siempre malas noticias.
Todo esto es gratis.

miércoles, febrero 02, 2005

Despedida sin cierre

Ya no vivo en Madrid
Recogí todas mis cosas, dije hasta pronto a casi todo el mundo, hice las maletas, las he metido todas en el coche y he dicho adiós a Madrid, al menos, seguro, hasta dentro de una buena temporada. Ha sido año y medio en la "capi". Y el balance no puede ser mejor. He vivido muchas cosas allí, buenas, malas y regulares. Ayer casi se me escapó una lagrimilla cuando le eché un último vistazo al piso, a mi habitación, tan vacía que parecía desconocida y tan poco acogedora como cuando la ví por primera vez. Adiós al mundo azul, a Gómeznarro 93. Cris, ya no me envies postales allí, Elena, tu tampoco. Y es que todo el fin de semana ha sido una despedida de la ciudad. Me pateé la Gran Vía, la Puerta del Sol, Callao, la Plaza Mayor, Tirso de Molina y la Plaza de Santa Ana, comí con Aitor. Y se me han juntado los adioses que salen de la garganta con los adioses que siente el corazón, por su cuenta y riesgo. La llegada a mediados de octubre de 2003, el Master, El Mundo, Marca, Julio, Rafa, Lizzette, Laura, Rebe, Mario, Sergio, Paula, Óscar, David, Burgui, Nacho, Victor, Lourdes, Merche...¿cómo voy a nombralos a todos?. Estos días se me ha juntado todo, sí, debería escribir una buena e inspirada crónica de estos días tan, tan intensos. Me lo debo, pero no quiero, en el fondo sé que no debo hacerlo. Alguien más sabio que yo dijo una vez que la vida no hay que escribirla, hay que vivirla. Y yo la he vivido al 200% estos meses. Y menos mal que me queda Roma.
Para los que no lo sepais, me voy a vivir a Zamora. Ironías del destino. Cambio el stress por el sosiego, el bullicio por la calma, paso del blanco al negro sin gris posible. Pero estoy feliz. Y seguiré blogeando, eso seguro. Seguiré escribiendo.