domingo, abril 24, 2005

ojos dos ojos Posted by Hello estábamos en las últimas, no nos quedaba dinero, tenías ganas de pasarlo bien y yo la mayor parte del tiempo tenía ganas de estar en otra parte y fue entonces cuando se te ocurrió que debíamos acudir a aquella fiesta que a mí me parecía tan estúpida pero que para tí de repente era tan importante y yo te dije sí, quizá esté bien, quizá es lo que nos hace falta aunque yo en lo que de verdad estaba pensando era en trenes en marcha y en aeropuertos y allí estabamos los dos en la fiesta organizada por tus amigos franceses en aquella casa junto a la playa y todo era gente guapa y canapés y tacones de aguja y pensé después de todo tus párpados, después de todo tu pelo, tu timidez disfrazada en el champán y tus caderas, siempre tus caderas pero después me oí decir alguien debería hablar con el pinchadiscos y después me oí decir ahora vengo y después ya no estabas o el que no estaba era yo a pesar de que perdí la noción del tiempo y quizá había abusado del martini y no sabía si llevábamos toda la noche allí dentro o acababamos de llegar y luego estamos pasándolo bien a que sí, estamos todos pasandolo bien y no me apetece nada tomar nada de eso que estáis tomando porque así ya voy bastante rápido, 'mersi' y cuando comenzó a amanecer y el cielo se puso azul y bajamos a la playa ya había pasado lo mejor y casi todo el mundo se marchaba de allí de la mano de alguien con quien no había entrado y recuerdo que te ví llegar con el rímel corrido pero fuiste tu la que dijiste tienes mal aspecto y yo el que te respondió hace mucho que deberíamos haberlo decidido y tu ya sabías de qué estaba hablando porque siempre sabías eso un rato antes que ello y ahora esta carta me hace recordar tus párpados no me preguntes por qué las cosas funcionan de este jodida forma ni por qué ni por qué no, y tenías razón una vez más, los veranos se inventaron para dar feliccidad y tener algo que recordar y un motivo para escribir las cartas que se envían en invierno

5 comentarios:

amstel dijo...

que bonito, Bowie; me gusta el ritmo que tiene el texto...no sé si es consciente o no, es tan rapido como la historia (no se si me explico mucho...), pero me ha gustado tela.
sldos

Stand by dijo...

Puede que los veranos de hace unos cuantos años sí fuesen para la felicidad; pero de eso ya hace unos cuantos años. Ahora se suceden los inviernos de nostalgia por los veranos de entonces, y veranos jodidamente chungos a 40 grados a la sombra.
Estoy con amstel, un texto rápido, de palabras precisas, para una historia tan rápida como un noche de verano.

manolai dijo...

todas esas notas sueltas, esa melodía diluída, el latido de un recuerdo urgente

Anónimo dijo...

Eh, ¡hola!

Qué tal fue el finde currando?
Yo me he pasado el puente con Agostina, una amiga argentina, ella haciendo trabajos del máster, yo ayudándola y escribiendo mis cosas.

Pensé en llamarte e ir a verte lunes y martes, si te apetecía, pero al final me pareció complicado... no queria dejar sola a Agos y, además, Manu y Naza se fueron a Cádiz y nos dejaron al cuidado del conejo...

No sé, pensé que irnos los tres te hubiera alterado mucho la vida, y que no era exactamente lo planeado.

No sé, ya me dices tú de nuevo cuando te motivaria, bueno, ya decidiremos.

Qué tal tú, por lo demás?

Madrid también te espera.

Abracitos.

Arcangel dijo...

La velocidad del texto invita a estar a nosotros también en esa fiesta. Vertiginosamente me visto alli, con las de los tacones de aguja, la gente guapa y los canapés. Una descripción intensa y maravillosa en la que me has trasportado a observarte a ti y a ella. Recuerda cada momento para cuando llegue el invierno.
Saludos.